La importancia de que los niños coman frutas y verduras

La importancia de que los niños coman frutas y verduras

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Las frutas y verduras son parte irrevocable de la dieta mediterránea. Sin embargo, cuando se trata de los niños las cosas no son tan fáciles, y comenzar a incluir frutas y verduras en su dieta diaria para muchos padres es un reto que no pueden llevar a buen puerto. La importancia de su consumo, entre tanto, reafirma que todo esfuerzo vale la pena.

Incluir frutas y verduras no es caro

Hay recursos en internet desde donde se puede revisar, por ejemplo, el próximo folleto Carrefour, una de las cadenas de supermercados más conocidas de España. En la mayoría de sus catálogos, vale mencionar, están las categorías de productos orgánicos, y las frutas y verduras. Así, es una buena herramienta para consultar.

Y es que las frutas y las verduras son alimentos económicos -sobre todo si se les compara con los alimentos que estarían sustituyendo en la dieta de los niños-, por lo que cumplir con las raciones diarias que recomienda la OMS o con la demanda propia del niño no será algo que requiere esfuerzos gigantescos desde lo económico, y eso es una ventaja.

Crear el hábito

A la mayoría de los que ahora son padres, no se les creó el hábito de comer frutas o verduras cuando eran niños. De hecho, podría ser esa la primera razón de que el consumo de frutas y verduras en los niños no sea algo tan arraigado.

Pero es importante crear el hábito. Por nutrición, por prevención de enfermedades, y por salud en general, puede irse creando el hábito de una forma incremental hasta que se llegue, al menos, a lo que dicta la norma o las recomendaciones de los especialistas.

Está más que demostrado que los niños que consumen frutas y verduras -o que al menos las tienen en el plato al momento de la comida-, tienen grandes probabilidades de ser ávidos consumidores cuando la adolescencia y la adultez lleguen, y esa es una importante enseñanza que debe legarse en ellos.

Aprovechar la diversidad

Siempre que se habla de la alimentación en los niños, se habla también de la diversidad, de la variedad y de la diversión, porque son conceptos que deben estar involucrados en las comidas de los niños para que estos se motiven.

Y precisamente, las frutas y las verduras permiten eso. Porque la mayoría de estos alimentos convergen en que son bajos en grasa, ricos en vitaminas y minerales, aportan fibra y son antioxidantes, pero no se puede dejar de mencionar que hay centenas de opciones distintas cuando se quieren comer frutas o verduras, razón suficiente como para incentivar al niño a descubrir sabores, olores, colores, y con ello hacer que cada comida sea mucho más divertida.

Garantizar la salud de los niños

España es uno de los países donde mejor se alimenta a los niños, ya que desde muy pequeños comienzan con el hábito del desayuno -la comida más importante-, pero no siempre esa comida tiene como protagonista a las frutas y verduras, sino que se opta por otros alimentos.

Garantizar la salud de los niños, aunque no exclusivamente, sí pasa por comer frutas y verduras de una forma más balanceada y sobre todo, diaria, puesto que es allí donde se ven los progresos en salud, en prevención de enfermedades, fortalecimiento de las defensas y corrección de pequeños problemas de salud o del desarrollo que puedan acarrear.

De la misma manera, las frutas son excelentes sustitutos de los dulces o snacks, con mucha menos cantidad de grasas y azúcares, y proporcionando mayor cantidad de energía.

Incentivar, llevar de a poco, trazarse el plan de incluir las frutas y las verduras como un hábito, tomará tiempo. Pero cuando ya esté logrado, los beneficios vendrán solos y será una de las mejores decisiones o esfuerzos que se hayan realizado por los niños. Su salud y su vitalidad lo justificarán.